Serán las mieles serenas
las que queden atrapadas en las horas
y la belleza del sonido nuevo
la que adorne la mirada perdida
Serán los caminos de otoño
los que nos lleven a la otra orilla
de ese mar consolado y suave,
ese que acuna las heridas
Serán las no promesas
O quizá el futuro ausente
Todos ellos harán espiga
todos ellos… de esta simiente